Las Tuberías de Cobre flexibles y rígidas permiten transportar gases y distintos fluidos, tanto fríos como calientes. El cobre, al ser un material versátil, fuerte, ligero y resistente a la corrosión, es perfecto para estas tareas. Existen distintos tipos de tuberías de cobre para el transporte de gases y líquidos. Estos son los principales:
- Tubería de cobre rígido tipo K: Su principal aplicación es en instalaciones industriales, transportando líquidos y gases en condiciones de alta presión y temperatura. Este tubo de cobre tiene un espesor de pared mayor en comparación con los tipos M y L. Sus usos van desde sistemas de calefacción hasta la fontanería de agua potable en edificaciones residenciales y comerciales.
- Tubería de cobre rígido tipo M: Se usa para la conducción de agua fría y caliente en edificios residenciales y comerciales, debido a que las presiones y temperaturas requeridas no son demasiado elevadas. Estos tubos de cobre rígido también se utilizan para transportar gas natural y gas licuado de petróleo (GLP) para calefacción, refrigeración y oxígeno.
- Tubería de cobre rígido tipo L: La tubería tipo L tiene paredes más gruesas y un índice de presión más alto. Resiste hasta 100 grados Celsius y soporta presiones de hasta 10 kilogramos. Se utiliza para agua fría y caliente, así como para la conducción de gas GLP y gas natural.
- Tubo de cobre flexible ACR: Este tipo de tubo se usa en instalaciones de sistemas de refrigeración, aires acondicionados, estufas, entre otros.
Las Tubería de Cobre cuenta con la ventaja de poder instalarse en posiciones curvas, de serpentín, paralelas o de flujos diferidos para el paso de gases y líquidos de distintas temperaturas, debido a su propiedad flexible. Por esta razón, en cualquier instalación que requiera curvas especiales, las tuberías de cobre son adecuadas.
¿Por qué cobre y no otro material?
Las Tuberías de Cobre no son inflamables ni emiten gases tóxicos. Su alta conductividad térmica las hace muy seguras en presencia de llamas, hasta el punto de ser utilizadas en instalaciones contra incendios. Su resistencia al calor extremo se debe al alto punto de fusión del cobre, por lo que las tuberías no se deforman ante temperaturas muy altas. Además, presentan un excelente coeficiente de dilatación térmica. Todo esto las convierte en ideales para calefacción y sistemas de agua potable. El frío tampoco afecta sus propiedades; no en vano el cobre es considerado un material criogénico. Por otro lado, gracias a su elasticidad, resiste bien las altas presiones y los golpes. Además, las uniones por soldadura también toleran condiciones extremas, lo que hace del cobre un material muy seguro y confiable.
Las Tuberías de Cobre permanecen inalterables con el paso del tiempo, incluso en condiciones